martes, 30 de noviembre de 2010

Venir a Mí todos los que esten agobiados y fatigados que yo los aliviaré.


¿Qué es adorar?
Es la relación connatural del hombre con Dios, de la creatura con su Creador.
Los hombres y los ángeles deben adorar a Dios.
En el cielo, todos, las almas bienaventuradas de los santos y los santos ángeles, adoran a Dios. Cada vez que adoramos nos unimos al cielo y traemos nuestro pequeño cielo a la tierra. Dt. 6,5
La adoración es el único culto debido solamente a Dios.
El cristiano, adorando a Cristo reconoce que Él es Dios y el católico adorándolo ante el Santísimo Sacramento confiesa la presencia real y verdadera en la Eucarístia.
Los católicos que adoran no sólo cumplen con un acto sublime de devoción sino que también dan testimonio del tesoro más grande que tiene la Iglesia que es la Eucaristía, en la que nosotros experimentamos la entrega a Dios mismo, el don que hace el Padre del Hijo, el sacrificio de Cristo por nuestra salvación y las gracias que recibimos con el Espíritu Santo.

¿Porque la Adoración Perpetua?
Porque es la mejor manera de responder al amor de Jesús.
Él nos ama con amor eterno (Jn. 15,16).
Por su amor se ha quedado entre nosotros en el Santísimo Sacramento.
Adorarlo en forma permanente, sin interrupción, es responder a la fidelidad y eternidad de su amor.

La capilla de adoración perpetua ofrece a todos una estación para detenerse en el camino frenético de la vida. Asimismo es un espacio para reflexionar y dejarse interpelar por la presencia de Dios que nos ha creado y que nos salva.

Quien adora encuentra paz, una paz desconocida para el mundo.
Nuestra adoración alimentará la devoción de otros a la Eucaristía, otras personas sentirán el impulso de acudir a los sacramentos, nuevas vocaciones religiosas despertarán, nuevas conversiones a la verdadera fe se manifestarán, familias enteras se beneficiarán con la unidad y la paz descenderá sobre el mundo.

"La adoración Perpetua ofrece a nuestro pueblo la oportunidad de unirse con aquellos que están en la vida religiosa para orar por la salvación del mundo, por todas las almas y por la paz en la tierra. No podemos subestimar el poder de la oración y lo diferente que hará al mundo"
Madre Teresa de Calcuta.


Horarios de Misa.

Templo parroquial:
Lunes a Sábados a las 07:00 y 19:00 hrs.
Domingos: 09:00, 12:00 y 19:00 hrs.

Capilla de San Martín Caballero.
Domingos a las 07:00 y 11:00 hrs.

Capilla de San Juan Bautista.
Domingos a las 10:00 hrs.

Capilla del Señor de la Misericordia.
Domingos a las 13:30 hrs.

Capilla del Señor de la Caña.
1° Viernes de cada mes a las 9:00hrs.



Sacramento de la Reconciliación.

Martes y Jueves de 07:45 a 09:30 y 18:00 a 19:00 hrs.
Viernes de 20:00 a 22:00 hrs.
Sábados de 08:00 a 10:00 hrs.


Horarios de Oficina.

La oficina parroquial atiende de lunes a sábado de 09:00 a 14:00 hrs. y por la tarde de lunes a viernes de 16:30 a 19:30 hrs.